La apuesta del PNIEC 2023 por el almacenamiento energético

El Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD/MITECO) publicó en junio de 2023 el borrador de actualización del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC 2023-2030). Entre los datos más interesantes y novedosos de este plan se destacan:

-El incremento en renovables sobre el uso final de la energía que pasa del 42 % previsto en la versión anterior del Plan, a cerca de un 48 %.

Reducción drástica de la dependencia energética exterior, el 49 % de la energía primaria deberá proceder de fuentes autóctonas frente al 27 % en 2019.

– En cuanto al sector eléctrico, se fija como objetivo que en 2030 las energías renovables aporten el 81 % de la generación, frente al 74 % de la versión anterior del PNIEC.

-El autoconsumo toma especial protagonismo gracias a los cambios normativos de los últimos años y al impulso del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, por lo que el nuevo objetivo implica alcanzar los 19 gigavatios (GW) en 2030.

-Para poder integrar toda esta cantidad de renovables en el sistema eléctrico, el PNIEC apuesta por incrementar el almacenamiento energético hasta los 22 GW.

almacenamiento hidroeléctrico

Se elevan las previsiones de almacenamiento energético

En el nuevo borrador del PNIEC se refuerza la apuesta por el almacenamiento para asegurar la integración de renovables en el ‘mix’ eléctrico. Se hace necesario acelerar la instalación de sistemas de almacenamiento y de gestionabilidad de la demanda. La Estrategia de Almacenamiento Energético de 2020 ya preveía disponer de 20 GW de almacenamiento energético en 2030, pero con el PNIEC 2023-2030 las previsiones se elevan a 22 GW.

Puesto que la futura provisión de energía provendrá fundamentalmente de fuentes renovables en muchos casos intermitentes y no gestionables, el almacenamiento de energía será uno de los principales elementos que proporcione flexibilidad al sistema energético.

El documento expresa que “el Plan busca la flexibilidad del sistema permitiendo que la gestión de la demanda y el almacenamiento contribuyan a una integración óptima de energías renovables, así como a la seguridad y calidad del suministro, reduciendo la dependencia y mejorando la seguridad de suministro”.

“El despliegue del almacenamiento energético requiere de un enfoque multinivel, siendo necesarios desarrollos normativos, de mercado, de gestión técnica del sistema energético y de elaboración de nuevos modelos de negocio. El desarrollo de estas tecnologías permitirá aprovechar el potencial de la gestión de recursos energéticos distribuidos renovables generando beneficios tanto para el sistema, por la mejora de la integración de renovables y gestión de la red, que redundarán en la garantía de la seguridad del suministro; como para garantizar que los consumidores, de forma individual o agregada, directamente o a través de otras figuras, pueden participar en la provisión de dichos servicios”.

Para ello, el PNIEC pone entre sus objetivos: “fortalecer y promover la industria nacional de almacenamiento para su uso en todas las aplicaciones posibles e integrar a diferentes empresas de la cadena de valor del sector energético. El objetivo es capturar el máximo potencial en cuanto a generación de desarrollo económico y empleo industrial derivados de la transición energética”.

La importancia del almacenamiento hidroeléctrico

Además de aumentar la previsión del PNIEC en almacenamiento y la flexibilidad, este nuevo documento de actualización aborda el desarrollo de la nueva capacidad de almacenamiento hidroeléctrico aprovechando, por ejemplo, embalses ya existentes, así como la necesaria reforma del sector y del mercado eléctrico, que debe también aportar los cambios necesarios para acelerar la instalación de nuevos sistemas de almacenamiento.

La actualización del PNIEC incide en que “las centrales hidroeléctricas reversibles tienen como característica una relación elevada de la potencia eléctrica disponible frente a energía almacenada, es decir, número de horas de almacenamiento que, junto con las características técnicas de su turbina, que suministra inercia rodante, hacen que estas tecnologías tengan muy buenas prestaciones para la integración de energías renovables. Adicionalmente, se trata de una tecnología madura y probada, sobre la cual se dispone en España de una amplia experiencia y conocimiento técnico, disponiendo de una solvente cadena de valor a nivel nacional. Es una tecnología flexible y ajustable a tiempos de descarga largos que permite afrontar diversos regímenes de explotación (horario, diario, semanal o incluso estacional). Las centrales hidroeléctricas reversibles contribuyen a la operación flexible y segura del sistema eléctrico, principalmente por su inercia mecánica – necesaria para mantener el sincronismo de las unidades de generación – y de su aportación a los servicios de ajuste. Por todo ello, el almacenamiento de energía mediante centrales hidroeléctricas reversibles -especialmente las de bombeo puro- es clave para la explotación de un sistema eléctrico basado en producción renovable”.

Por el momento, está abierto el proceso de consulta pública sobre este nuevo PNIEC hasta el 4 de septiembre, con el objetivo de tenerlo finalizado en junio de 2024.